DESINFECCION

Sinceramiento concordante con el sufrido en la Concertación K. Si los poderes de la Republica quieren recuperar su papel conforme a lo habitual en un país democrático, deberían sincerar ciertas situaciones y corregirlas de inmediato. Una de ellas es depurar dentro de sus filas, a los elementos extremistas que carcomen su naturaleza, desvirtuándola y llevando a situaciones inéditas como las que acabamos de vivir y soportar todos los argentinos. Estamos poblados de personajes que demostraron en tiempos pasados, ser muy buenos colocando bombas o peleando contra gobiernos de facto y democráticos. Sin embargo su desempeño actual solo requiere de otras cualidades, pues es otro el medio en el que deben actuar: un país que desea la paz, el trabajo, el progreso y ansia consumar un desarrollo y progreso que lo inserte entre los mejores como insinúa su potencialidad. Estos individuos no encajan en esa realidad, ya que como dije sus capacidades están enfocadas en la lucha mortal contra los que consideran sus enemigos. Al no encontrarlos hoy, los inventan, los fabrican, los corporizan en personas y entidades que nada tienen que ver con su alineación. Así vemos que se habla –mas bien se vocifera- de “grupos de tareas” o mas ridículo aun se desentierran “comandos civiles”, “golpistas” y “oligarquías vacunas” mas acordes con pesadillas de un pasado confrontativo y guerrillero que de la simple conformación de distintas posiciones político-ideológicas democráticas. Los nostálgicos del Che, de un socialismo anacrónico, de un mundo bipolar no entienden que hoy las fronteras no son horizontales, entre Este y Oeste, Norte o Sur, sino verticales en cada país o región del mundo. Tienen mas en común un rico o un pobre de otro país –desarrollado o no- con el nuestro que los países globales entre si. El esfuerzo debe estar dirigido a solucionar nuestros problemas, en las capas excluidas nacionales, reconociendo nuestras carencias facticas en vez de buscar culpables externos, como si fuésemos victimas infantiles o indefensas ante el malo de la cuadra. Debemos asumir nuestra responsabilidad, comprometiéndonos todos los días pues no siempre encontraremos un De Angeli o un Cobos –y hasta un Felipe Sola- que nos abofetee ante nuestra defección. Los anticuerpos han actuado, ahora viene la desinfección, para extirpar la enfermedad de la Violencia, de la Venganza. FELIZ DIA DEL AMIGO. ARGENTINA RESISTE