sábado, 4 de abril de 2009

El baston de mando no consuela

Tanto querer ser presidentA y ningún disfrute. Aclaro que me refiero al consuelo compensador del sentimiento de que nada de lo que uno o una hace, esta bien recibido en Argenzuela. Anuncios tras anuncios, discursos filosóficos sobre como cambiar calefones, viajes tras viajes, modelitos tras modelitos y solo criticas destituyentes. Pascual Pasaguay a comparación de la faraona, es un poroto. Falta que le adjudiquen el 6 a 1 de Bolivia a Maradona y sus muchachos. Ahora se de donde saco el usurero ese gesto de tocarse lo que debería tener, con semejante mufa al lado.

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