Los que conocíamos la
historia del Tuerto y su parejita, que en medio del enfrentamiento entre la
Dictadura y la guerrilla montoerpiana, abandonaron a los que hoy dicen admirar
y huyeron raudamente hacia el sur desapareciendo de La Plata sabíamos que no
era para hacer Habeas Corpus sino “para hacer platita” según sus propias
expresiones. El primer sentimiento es de repulsión ante semejante confesión de
quienes después se reivindican como luchadores por los DDHH, propia de usureros
y caranchos apropiadores de las viviendas en su beneficio patrimonial. Pero el
asco de estos cobardes mentirosos ha tapado otra cosa: el motivo que declaran.
Irse al sur “para hacer platita, porque para hacer política hay que tener
platita” Una frase que define desde la cuna la corrupción que hoy vemos como “actividad
militante”. SIMPLE CHOREO.
EL TUERTO DESAPARECIDO
MISTERIOSAMENTE ES EL LADRON MAS GRANDE DE LA HISTORIA NACIONAL. "Para
hacer política se necesita platita..." decían los dos KK. ¿Para que? Para
comprar voluntades como forma de avanzar en la ocupación de todo negocio, todo
fondo, todo sector productivo de riqueza y especulación y afianzar su poder
corrupto. Para hacer política hasta ahora se necesitaban otras cosas: ideas,
conocimiento, decisión, metodología y aprovechamiento de las oportunidades, no
solo "platita". Este Makiavelo patagónico, demostró sin embargo, que
bajo grado de honradez y decencia campea entre los argentinos. Coimeo a medio
mundo. EL HUARPE
No hay comentarios:
Publicar un comentario